Ollantaytambo

Algo que no muchos hacen al venir a Cuzco es pasar una noche en los pueblos más pequeños. Nosotros en vez de terminar el paseo por el valle sagrado de vuelta en Cuzco fue quedarnos en Ollantaytambo. La ventaja de esto es que pudimos quedarnos mucho más tiempo en las ruinas que les mostré en el post anterior, por ejemplo...

y le dijimos chao desde las alturas al que era nuestro guía mientras nos aventurábamos mucho más en las ruinas de lo que el tour permitía. Ningún problema porque abajo en el pueblo no tardamos en encontrar un hotel nuevo y prácticamente vacío donde nos dieron una pieza por 35 soles, es decir, menos de 6 lucas y eso sin mi regateo tradicional :-D

Lo rico fue no solo terminar el día anterior con calma y viendo las cosas en más detalle, sino que también pudimos al día siguiente levantarnos para recorrer el lugar. Curiosamente, encontramos muchas similitudes en la forma de las calles y los riachuelos a la entrada con lo que vimos en China. Al final las soluciones rurales tienden a ser las mismas en todas partes. Las calles sin embargo super ricas para caminar y conocer y 100% libre de turistas!

De ahí a comer algo nomás 

y partir al tren que nos lleva a Machu Pichu, que sólo parte de este pueblo. Aprovechando de ver al una versión desconocida del autobot andino:

y nos fuimos!!!